domingo, 25 de mayo de 2014

montgomery clift



Para darle la réplica a Jennifer Jones en Stazione Termini De Sica no recurre a Marlon Brando, como preveía Zavattini en un principio, sino a Montgomery Clift, actor teatral de estilo tenso con preferencia por los personajes atormentados.

Clift acaba de encadenar una larga serie de éxitos en el cine: Río Rojo (Red River, Howard Hawks, 1948) junto a John Wayne, La heredera (The Heiress, William Wyler, 1949) con Bette Davis, Un lugar en el sol (A Place in the Sun, George Stevens, 1951) con su amiga Elisabeth Taylor, y Yo confieso (I Confess, Alfred Hitchcock, 1953), en la que comparte pantalla con su propio complejo de culpa.

Clift ha visto en sus estrenos neoyorquinos El limpiabotas y Ladrón de bicicletas, y aprovecha una visita turística a Italia a principios de la década para expresar su admiración a De Sica, que anda embarcado en el rodaje de Milagro en Milán.

Durante su estancia estadounidense, De Sica descubre que Clift está rodando en Quebec con Hitchcock y hace una escapada a Canadá para ofrecerle Estación Termini.

domingo, 11 de mayo de 2014

carlo montuori



De la imagen de Ladri di biciclette se hace cargo Carlo Montuori, un veteranísimo director de fotografía que según Risi, “parecía uno de los enanitos de Blancanieves”.
Colaboró ya en el Ben-Hur (Ben-Hur, Fred Niblo, 1925) de Ramón Novarro e iluminó las primeras películas de Blasetti. A principios de los años cuarenta ha sido el responsable de buena parte de las coproducciones hispano–italianas o italianas para el mercado español, y trabaja con De Sica sólo en blanco y negro, cubriendo buena parte del ciclo neorrealista.